Entre un humano & una maquina.

Ética II.

El empleo de software basado en inteligencia artificial, capaz de crear imágenes, audios & videos a partir de descripciones escritas, está experimentando un auge sin precedentes. Estos programas han generado diversas y sorprendentes producciones, algunas con un grado de detalle tan refinado que han originado confusión entre usuarios de redes sociales, dificultando su discernimiento entre lo real y lo ficticio. Esto ha suscitado temores de que dichas plataformas puedan contribuir a la propagación de desinformación.

Para que una persona pueda diferenciar entre su conversación con una IA y una conversación con un ser humano, es importante tener en cuenta que las máquinas no pueden sentir emociones ni entender completamente las necesidades y preocupaciones humanas. Además, las respuestas de las IAs a menudo son más precisas y rápidas que las de un ser humano.

Recuerda que, a pesar de su complejidad, una IA no es una persona, sino un programa de computadora diseñado para ayudarte.

Es importante recordar que, al hablar con una IA, estás interactuando con un software que ha sido programado para responder de manera precisa y rápida, pero que no tiene emociones ni puede entender los sentimientos humanos de la misma manera que lo hace un ser humano.

Utilizando a florIAn (ChatGPT, Bard/Gemini & Pi) generamos el siguiente texto a partir de la necesidad de diferenciar entre la respuesta de un humano & las webs conversacionales (ANI).

Diálogo entre Web Conversacionales. 28 de enero de 2024.